5. “Cry Macho”
Si en “The Power of the Dog” vemos a un hombre luchando por conservar el machismo del salvaje oeste, en “Cry Macho” el vaquero icónico de Clint Eastwood revela una conmovedora suavidad, que el director y actor ha explorado durante los últimos 20 años. Menos parecido el refunfuñón amargado de “Gran Torino” y más al tierno entrenador de “Million Dollar Baby”, el Mike Milo de “Cry Macho” deja ver un lado sensual y romántico del actor, algo que no veíamos desde “The Bridges of Madison County”. Como director, Eastwood nos recuerda que quedan ya muy pocos maestros como él, artistas concentrados en contar historias y sorprendernos por lo efectivo de su clasicismo, llevándonos del punto A al B sin trucos ni maromas.