Esta semana el 14 de julio se celebra el día de la hondureñidad por lo que esta semana les presentamos una obra del padre del arte moderno hondureño Pablo Zelaya Sierra, quien a través de su mundo pictórico de colores cálidos y de gran influencia cubista capturó retratos de la vida cotidiana de la Honduras bucólica, dejándonos obras que construyeron fuertemente buena parte del imaginario visual tradicional de nuestra gente, espacios y vida. En el caso de la Muchacha del Huacal, probablemente es una de las piezas más reconocidas del arte nacional, en este lienzo Zelaya Sierra nos pone ante una escena bucólica del campo: en el primer plano nos encontramos con la escultural figura de una joven mujer que, recostada sobre el suelo, recolecta con un pequeño huacal agua de lo que probablemente es un río calmo que refleja parte de su figura; detrás de ella encontramos otra escena propia del espacio rural, el que otra mujer, de edad avanzada, camina de regreso a su hogar oculto entre montañas cargando con un cántaro; a su par vemos una hermosa yegua blanca que resguarda a un potrillo lo que nos confirma que las mujeres del cuadro son madre e hija, dinámica reproducida en los animales. Detrás de ellas se extienden esas infinitas montañas del paisaje hondureño. Es una obra que de manera cálida y sutil nos transporta a ese rostro de la hondureñidad que muchas veces ignoramos desde la distancia, que vuelve visible a quienes usualmente son olvidados y que les convierte en los protagonistas cotidianos que en realidad son.
Ubicación: Pinacoteca Arturo H. Medrano, Banco Central de Honduras